Cuando me perdí y deje de reírme de mi misma, aprendí que no tengo nada mas bonito en el mundo que mi propio mundo... ese que se esconde debajo de mi ropa, es mas, diría hasta de mi piel... mis ganas que corren como sangre por mis venas... mis deseos, mis logros y los proyectos que a diario rectifico y vuelvo a poner en marcha!
En esos días que las tormentas abatieron incesantemente la calle de mi vida, descubrí que detrás de cada lagrima que derrame, por ella, por el, por vos... Continuar leyendo